Por: Vanessa García Sin pensarlo 2 veces y con una fé inquebrantable que siempre me ha caracterizado decidí renunciar a mis 2 trabajos limpiando oficinas para ir en búsqueda de algo que me permitiera perfeccionar mi nivel de inglés e interactuar con otras personas. Fue así como por varias semanas recorrí cientos de restaurantes, bares y cafeterías de Brisbane en busca de aquella oportunidad. Preparé un corto pero convincente discurso sobre mí, expresaba las ganas que tenia de trabajar incansablemente y con una enorme sonrisa y la mejor actitud salía en busca de alguien que creyera en mí y me diera una oportunidad. Al poco tiempo ya estaba trabajando en un restaurante griego por las noches y otro restaurante español los fines de semana al mismo tiempo que completaba mis estudios de Negocios que recientemente había comenzado. Durante este tiempo mis días consistían en trabajar largas horas, cumplir con mis horas de estudio obligatorias para mantener mi visa de estudiante y social...